Las tradiciones han estado presentes desde el principio de los tiempos; la mayoría de nuestra cultura ha perdurado gracias a las costumbres y la transmisión de conocimiento generación tras generación. Cada región y cada familia tiene sus tradiciones propias, lo que nos hace especiales, únicos e irrepetibles.

Las personas mayores han vivido y experimentado muchas tradicionales a lo largo de su vida que transmiten en forma de conocimiento y vivencia a los más jóvenes. Desde la pequeña historia que te explican de su juventud, hasta la manera de resolver un inconveniente. En su mayoría, las personas mayores han crecido rodeadas de tradiciones. Aprendieron todo de sus padres y abuelos y ellos después lo transmitieron a sus hijos.

Mantener las tradiciones proporcionará un estado de bienestar y confort propios de sus hogares como antaño. Seguir con sus procederes o conservar intactas algunas de sus tradiciones les hará tener recuerdos bonitos de sus tiempos anteriores. Además, esta reminiscencia les permitirá sanar heridas o sentimientos provenientes de su memoria.

Otra manera muy eficaz de seguir con las tradiciones es juntando a diferentes generaciones. A través de las experiencias intergeneracionales, todos disfrutamos explicando diferentes costumbres que se tienen en casa y, cómo querrán ellos trasmitirlas a sus futuros hijos. La juventud busca consejo en sus mayores.

A través de espacios intergeneracionales se consigue llegar más lejos en los vínculos y amistades que se puedan generar en sitios como residencias y centros de día. Es importante mostrar a los más jóvenes que las tradiciones son vida y cultura, son reflejos de una educación y valores. Aprender de los más mayores es otra manera de preservar el legado que nos queda.

Las vivencias pasadas son vida y cultura y ahora más aún que se acercan fechas señaladas y navideñas. Llenarles el corazón con amor y celebraciones a su gusto es una prioridad desde Vidallar Serveis.