Cada vez son más los centros residenciales que aplican terapias innovadoras con un propósito muy claro: mejorar la calidad de vida de las personas mayores.

Las terapias innovadoras y las clásicas, que se van reinventando con la incorporación de nuevos avances, informes e investigaciones, proporcionan muy buenos resultados y consiguen importantes beneficios para la salud.

Entre las terapias que se están implantando en residencias de ancianos y centros de día, que conviene conocer para intuir si se trata de un centro de calidad y poder elegir adecuadamente el que más se adapta a las necesidades de nuestros familiares, conviene resaltar las siguientes:

  • Fisioterapia: ofrece respuestas a aquellas personas que han sufrido un proceso quirúrgico, un traumatismo, un trastorno cardíaco, una debilidad muscular u otros procesos que requieren una recuperación funcional después de una larga inactividad. Dentro de la fisioterapia, podemos englobar actividades deportivas, así como la hidroterapia y la wiiterapia (videojuegos con la consola Wii para ejercitarse).
  • Musicoterapia: reduce el dolor y disminuye la ansiedad. Suele realizarse en sesiones grupales y, con ello, se favorece la socialización y la comunicación, además de mejorar la autoestima.
  • Aromaterapia: mejora las alteraciones de la conducta e incide positivamente en el retraimiento social.
  • Nutrición: orientada a cada necesidad particular, para conseguir la mejor alimentación y, con ello, una buena salud. Se realizan, según cada persona, varias dietas (líquida, blanda, semiblanda y normal), así como especificaciones relacionadas con intolerancias y dietas antioxidantes.
  • Acuaterapia: uso del agua con fines terapéuticos. Se recomienda para paliar y tratar patologías a nivel traumatológico, neurológico, reumatológico y post-cirugía.
  • Terapia con perros: fomenta la actividad física, refuerza la comunicación afectiva y lúdica, trabaja la estimulación cognitiva y sensorial, favorece la expresión de emociones y activa la memoria.
  • Técnicas de expresión corporal: tienen como objetivo experimentar, expresar y compartir recuerdos, ideas y estados de ánimo a través del movimiento. Consiguen una mejora de la motricidad, reducen la percepción del dolor, generan vínculos afectivos entre los participantes y mejoran el estado de ánimo.